La amistad es un verdadero regalo dado por el destino y la niña lamada Maisie tiene mucha suerte en este sentido, porque desde su nacimiento tiene la amiga más amable y fiel. Sí, es peludo, enorme y puede lamerse la cara, pero siempre está ahí y nunca traicionará.

Cuando la pareja supo que habría una nueva incorporación a su familia,etaban muy felices. Un día, sus amigos preguntaron qué harían con su perro  llamado Marshál.La pareja respondió que es un verdadero miembro de la familia y el favorito de todos. Y luego resultó que el perro estaba muy feliz con la apariencia de la niña.

Los padres jóvenes dijeron que cuando trajeron a la pequeña Maisie a casa, Marshál estaba muy emocionado, movía la cola todo el tiempo, miraba hacia la cama del bebé, quería tocar su nariz e incluso lamerla.Marshál a veces la confundió con su hermana menor. La envolvió en cuidado y amor.

Desde entonces, Marshál siempre ha estado con Maisie: cuando dormía, comía o simplemente se acostaba. A veces él era su suave almohada, jugaba con ella y en otras ocasiones la ayudaba a ser traviesa.

Los padres del bebé han creado una página en las redes sociales, donde comparten sus fotos y videos conjuntos. A los usuarios les gustó tanto esta compañía inusual que comenzaron a suscribirse a la página y escribir comentarios.

Así  el primer encuentro de un perro y una niña se convirtió en una fuerte amistad. Ambos son increíblemente felices. ¡Solo mira estas fotos! Seguro que no dejarán indiferente a nadie.