Todos los bebés nacen maravillosos y hermosos a su manera. Y no importa en absoluto de qué color es su piel, de qué raza son, quiénes son sus padres y qué han logrado en su vida.Pero hay algunos bebés que son muy unicales. Por ejemplo, los hijos de la fotógrafa Judith Nwokochi, una mujer de Canadá y de origen nigeriano.

El niño Kamis tiene piel oscura, cabello negro y ojos marrones, como su madre. Pero la hermana, Kachi es albina y muy diferente a su hermano.

Judith dice que siempre ha soñado con los gemelos, y ya cuando fue a la ecografía estaba segura de que se lo dirían. En el  hospital le dijeron  que en realidad hay dos bebés debajo de su corazón.En la siguiente ecografía le dijeron que uno de los bebés naciera con el síndrome de Down.“A las 7 semanas Kachi era muy pequeña y no crecía. Los médicos dijeron que tal vez no sobreviviera. ¡La madre estaba tan contenta de que haya sobrevivido!En la semana 37 de embarazo se encontró que la niña había dejado de crecer. Se necesitó una operación. La madre tuvo una cesárea. Kamsi nació primero a las 21:44, después de Kachi.

Cuando Judith le llevaba a la bebé en sus brazos por primera vez, no creía que fuera su hija.

“¡Estaba tan contenta de que ella hubiera nacido perfecta! Ambos bebés estaban sanos.

De hecho, además de la mala vista y la piel sensible, Kachi es saludable. Por supuesto, ella llama la atención de muchos y esto no le molesta en absoluto a su madre.

Su madre dice que “no se dió cuenta inmediatamente de que tendría que criar a un albino.Se preocupaba lo que diría la gente. Es muy inusual dar a luz a un bebé albino y otro de la piel negra.

Hay una relación muy cálida y amistosa entre el hermano y la hermana.

¡Los dos tienen mucha suerte de tenerse el uno al otro!