Los niños talentosos nacen en todos los tiempos y entre todas las naciones. No tienen que asistir a las clases especializadas. El talento lo reflejan en la danza, la música o el dibujo. Uno de esos casos es la historia de Karim Waris Olamilkan de Nigeria.

Nuestro héroe nació en una familia sencilla, donde no había artistas, pero la naturaleza le dió un regalo increíble: dibuja muy bien. Karim comenzó a crear sus primeras pinturas a la edad de 6 años. No tenía los suministros profesionales para el arte.El niño disfrutó el proceso de dibujar y comenzó a mezclar colores y ponerlos en un papel.

A la edad de 8 años, Karim, junto con su familia: madre,padre y abuela, cambiaron su lugar de residencia. Afortunadamente, la Academia Profesional de Arte Ayowole estaba cerca de su nuevo hogar. Los alumnos de la academia estaban pintando en la calle y el chico empezó a mirarlos con entusiasmo. El pequeño artista se dio cuenta de que no era el único que estaba interesado en dibujar.El director de la academia vio las pinturas de Karim y quedó asombrado por el talento del niño.Desafortunadamente, debido a la escasez del dinero, nuestro héroe no siempre puede realizar sus ideas. La familia de Karim recibe ayuda del maestro para sus estudios. Pero no hay dinero para el papel especial,pinceles y otros materiales de dibujo. El niño dice: “Mi familia trabaja mucho para que tengamos algo para comer. Y eso me inspiró”.

El estilo principal en el que trabaja el niño es el hiperrealismo. Dibuja las caras de las personas con un gran detalle. Están representados con tanto detalle que parecen fotografías.Una de las obras exitosas de Karim se llama “Pan de cada día”: El significado de esta imagen: ganar comida es duro.

Karim cree que tiene un gran futuro en el mundo del arte. Planea graduarse de la academia y buscar oportunidades de la educación superior. Hoy el chico tiene  suscriptores en Instagram que admiran su trabajo.

Nada es imposible en este mundo. Si alguien tiene un don único y lucha por su sueño, tendrá exitos, como lo hace nuestro héroe. Lo principal es seguir avanzando y nunca rendirse.